Iggy Pop
"Oh baby i gotta go
the communist world is fallin apart
the capitalists are just breakin hearts
money is the reason to be
it makes me just wanna sing louie louie
louie louie.."
Frontman, apoteósico, esta iguana de Detroit ha sido protagonista incansable en la audaz pujanza escénica del punk. James Newell Osterberg (Iggy Pop), es el estandarte punketo por excelencia, influenciando a a varios artistas, incluyendo hasta al mismísimo Sid Vicious y sus Sex Pistols.
Desde su sus pininos con su primera banda The Iguanas, donde era el batería a su segundo grupo The Prime Movers, pocos creen que sus primeras tendencias eran totalmente blueseras abandonando su carrera de antropólogo para escarbar en los los anales de ritmos, encaminándose al áspero y anarquista punk. Entrado en el 66, asumiría la función de líder y gurú espiritual de su nueva banda con la franca influencia de Jungle Jim (Jim Morrison) adoptando también sus excesos y vicios , naciendo así The Psychedelic Stooges. La fuerza derrochada en cada escenario por Iggy y el rock abrasivo del grupo –ya solo como The Stooges-, llamaron la atención del sello Elektra y fueron fichados por la misma. En el 68 editan el formidable The Stooges con sus letras nihilistas y su sonido de rock garage.
En el 70 echan a la calle el extraordinario y freakiesco Funhouse. El hit “Louie, Louie” sentó para muchos las bases sonoras del punk con su puñado de canciones duras y anárquicas. A pesar de ser materiales excelentes, sus bajas ventas obligan a la disquera a rescindirles el contrato. En medio de su zambullida en las drogas y un curso musical sin futuro, son adoptados en el 72 por otro icono glam de la época para producirles un acetato. El camaleónico David Bowie les produce otro éxito en su carera con Raw Power, pero el trasegar de los estupefacientes y los excesos terminaron por pasar factura y la banda se disuelve en el 74, mientras Iggy Pop es ingresado en un sanatorio mental.
Ya recuperado de sus inmersiones narcóticas, Iggy vuelve a colaborar con Bowie para grabar dos de sus mejores trabajos. The Idiot (1977) que incluía el corte electrónico de “China Girl” y su LP en directo T.V. Eye Live (1978). Los 70 fueron influyentes en el desarrollo del punk en él, sobresaliendo sus actuaciones en vivo (inventando el stage diving o salto al público), amen de tirarse carne cruda, untarse mantequilla de maní y cortarse el pecho con botellas rotas, además de hacer gala del shlong en escena, presumiendo su miembro al calzarse pantalones muy ceñidos.
Siempre vigente este adicto de los slammin’ backbeats, llega a freírnos los tímpanos con sus implacables riffs de guitarra tras dejar la mente crocante con sus letras que abogan por la revolución y el alma en la roca de las verdades eternas –veranos, noches, autos, mujeres, dolor-, son colectivas pruebas de que Iggy Pop no ha cambiado mucho la ruta en su papiro punketo del movimiento cultural que ha sufrido más que un simple cambio de mobiliario en el dormitorio de los adolescentes. Ha sido una completa revolución en moda, gestos, formas de vida y expresiones artísticas, dando un impulso galopante de mejorar el mundo sesentero con sus veranos de amor, al dar entrada al No Future dentro de los inviernos del odio de una década.
Este reptil que ha sabido conservar sus fuerzas en un escenario cual púbero veinteañero, sigue reptando por los muros inacabables del hard rock y destilando sudor –un licor de absenta para muchos- con cada nuevo proyecto; sumándole tablas a su incansable trayectoria también dentro del cine y con otros monstruos contemporáneos suyos como Tom Waits en Coffe & Cigarrets. Un stage diving en close-up al coro de “Louie, Louie” al padrino del pUnK, y ya no digamos iguana: Iguanodonte del rock.
Israel Crens
Tribuna Campeche
De Culto Vol. I
Walnut Street Ediciones ®
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