Neil Diamond / De Culto

 

 

  Neil Diamond

 

   por Israel Crens

 

"September morn

 We danced until the night

 Became a brand new day

 Two lovers playing scenes

 From some romantic play

 September morning

 Still can make me feel that way..."

 

 

 Mezcla de patriota, conservador, romántico y optimista, es el tipo de cantante que logra unir lo terriblemente liviano con lo más profundo de los sentimientos.  Un cantautor que decidió instalarse en medio de la era del classic rock, entre Tom Jones  o  Frank Sinatra, armonizando dulcemente, cada década subsiguiente.  Neil Leslie Diamond.

 

Contando apenas con 16 años recibió una guitarra como regalo de cumpleaños. Luego le siguieron las lecciones para aprender a tocarla y, como si fuera un proceso natural, le siguió la composición de temas.

Entró a la Universidad de Nueva York a estudiar medicina financiada por una beca y aunque avanzó en sus estudios, se apasionó tanto por la música que abandonó la Universidad cuando sólo le faltaba un semestre para graduarse para ir a trabajar a una productora por US$50,00 semanales. Hoy más que nunca, jamás lamentó su decisión.

 

Eventualmente alquiló una oficina en Broadway por US$35,00 mensuales para dedicarse a la pasión de componer música. Después de unos años trabajando en estos términos Jeff Barry y Ellie Greenwich, ambos productores, se acercaron para conocer su trabajo. Eso llevó a que Diamond firmara con Bang Records.

 

Su primera sesión de grabación, en 1966, grabó las tres canciones que se convertirían en sus primeros éxitos: Solitary Man, Cherry, Cherry  e  I Got The Feeling (Oh No, No).  Además, ese mismo año, llegó al primer lugar de las listas de popularidad como compositor con  I’m A Believer   interpretada por The Monkees a quienes también les compuso algunos temas. En Bang grabó cuatro LP’s  The Feel of Neil Diamond  (1966 debut),  Just For You  (1967), Neil Diamond’s Greatest Hits  (1968)  y  Shilo  (1970).

 

En 1969 grabó  Brother Love’s Traveling Salvation Show/Sweet Caroline.  Uno de los discos más importantes de su carrera, no sólo por el éxito en las listas, sino por la combinación del gospel y el pop. Un año después salió Touching You, Touching Me  que incluyó  Holly, Holly   y en el que experimentaba con ritmos africanos.

 

Entre el final de los sesenta e inicios de los setenta publicó los álbumes  Velvet Gloves and Spit  (1968),  Stones (1971) y  Moods  (1972), que incluyeron los número uno  Cracklin’ Rosie  y  Song Sung Blue.  Su primer disco en directo también se grabó en ese período, Hot August Night.

 

En 1973, firmó con el sello discográfico Columbia en el que ha desarrollado su carrera.  El primer disco bajo ese sello fue  Jonathan Livingston Seagul, que se convirtió en el segundo disco mejor vendido de su carrera y le valió el Grammy y el Globo de Oro. En 1974, presentó Longfellow Serenade.

 

En la cresta de la popularidad, Diamond, anuncia un retiro sabático para dedicarse a su familia. Terminada la pausa, en 1976 volvió llenando conciertos en Australia y Nueva Zelanda y alcanzando el platino con el disco  Beautiful Noise, haciendo algunas apariciones para  radio y  televisión.

 

Al año siguiente, vuelve a grabar en directo. En el 78 grabó junto con Barbra Streisand   You Don’t Me Bring Me Flowers.  Los álbumes I’m Glad You’re Here With Me Tonight  (1977)  y  September Morn  (1980) lograron altas ventas, certificando platino para ambos acetatos. 

 

 En 1980 hace el rol protagónico del film The Jazz Singer,  una cinta donde relata las vivencias que tiene que pasar un judío para poder dedicarse al mundo artístico.  Los cortes del soundtrack incluyeron los grandiosos temas  Love On The Rocks, América  y  Hello Again.

 

Luego del éxito del inicio de los 80, debió esperar hasta la década de los 90 para volver a figurar. Especiales de Navidad en los canales HBO y ABC le llevaron a grabar discos navideños en dos ocasiones con buenos resultados comerciales.    

 

 A diferencia de muchos artistas de su tipo, Diamond siguió componiendo y cantando canciones nuevas, aunque también dedicó un disco a sus temas favoritos de las décadas de los 50 y 60.

 

Su capacidad de adaptación se ve en el directo de 1994 Live In América  que documenta sus conciertos de dos años en los que el escenario era enteramente redondo y hacía del espectáculo algo realmente novedoso. Algo que Phill Collins, Peter Gabriel  y U2 igualmente usaron en algunas giras.

 

1996 lo tomó grabando con artistas Country en la ciudad de Nashville. Ese mismo año presentó una antología con 70 canciones, 37 de las cuales fueron éxito. Además, venía un folleto de 72 páginas con fotos, entrevistas, partituras y letras. Vendió la friolera de 110 millones de copias y fue un éxito en todo el mundo.

 

En 1998 grabó un disco de corte crooner, The Movie Album / As Time Goes By, en el que presenta 20 temas importantes de la cinematografía. El disco se grabó en vivo y la orquesta fue conducida por Elmer Berstein, uno de los compositores más importantes de temas de películas.

 

Lamentablemente la inesperada noticia de que padece Parkinson, le llevó al terrible momento de decirle adiós a los escenarios tras 50 años de ser uno de los músicos más talentosos que se ha conocido en las últimas décadas. Aunque su creatividad -asevera-, no le quitará del estudio de grabación y otras formas para expresar su arte hasta donde la enfermedad se lo permita.

 

Neil Diamond, supo mantenerse activo  y aunque ahora su ritmo de trabajo haya menguado un tanto, seguirá estando presente su frescura en diversos artistas que le han versionado uno que otro éxito.  Un escalón importante en la música folk en los Estados Unidos durante los años 70 , así como sólida base al new romantic de otra maravillosa década. Los 80. 

 

Israel Crens

De Culto 

Walnut Street Ediciones ® 

 

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